viernes, 3 de julio de 2015

Viernes de cuentos

Hola a todos! Hoy les traigo otro cuento. Espero que les guste:

"Oscuridad"

Me desperte en un cuarto eterno. Decidi llamarlo así, porque esta todo totalmente oscuro y vacío. Solo estoy yo y mis pensamientos. Apenas puedo percibir donde esta el piso porque lo siento bajo mis pies, pero no podría decir donde se encuentra el techo o sus paredes.
Tengo que admitir que al principio sentí un poco de miedo por el echo de no saber dónde me encontraba, y más cuando me detenía a pensar que me había dormido en mi propio cuarto. Con el tiempo, indeterminado, aunque yo apuesto a que fueron unos minutos, la sensación de soledad y miedo se alejaron de mi, muy de a poco, pero lo hicieron.
Me empece a sentir segura de que nada ni nadie podía lastimarme. Acá iba a ser todo como yo quisiera, mis reglas, mis normas, mi tiempo, mi espacio, mi mundo. Aunque en verdad, muchas cosas no sabia, ni sentía cómo eran, ni sabia cómo había llegado, ni por qué estaba ahí, es decir, con qué fin, pero estaba feliz de estar. Me sentía completa y eterna. Jamás en mi vida me había sentido tan libre, y al mismo tiempo privada de mi libertad, era una sensación única y creía ser capaz de amarla, ¿Amar a algo invisible, que ni siquiera sabía si estaba?. Ya no importaba responderme. No se qué día, ni qué hora es, tampoco podría saber en qué estación del año nos encontrabamos. Tenia la firme sensación de que había pasado muchísimo tiempo, pero no tenia forma de saberlo y tampoco quería.

Comence a sentir sueño y una leve brisa fría, "¿De dónde vendra?". Me detuve un momento, y termina decidiendo analizar el echo luego de despertarme. Estaba lo suficiente cansada como para poder mantener los ojos abiertos y encima pensar eso. Me recoste sobre el suelo, cerre los ojos y comence a oír una voz que me llamaba y me decía, "Ambar, esperamos tanto este momento". Comence a ver una luz que me cegaba, y pude sentir unas sabanas suaves, con un tubo fino, pero largo, tan largo que ni siquiera podía sentir dónde comenzaba y dónde terminaba. De fondo solo se escuchaba un pítido y otra voz que decía, "Sinceramente, ya no nos quedaban esperanzas". No reconocía ninguna de las dos voces, aunque al menos la primera me resultaba familiar. Solo esperaba seguir estando a salvo y feliz, seguir siendo eterna, en mi espacio eterno. 

Ya saben que pueden dejarme sus comentarios, opiniones, críticas (positivas y negativas). Todos los comentarios son bienvenidos!
Muchos besoss, nos encontramos de vuelta el lunes y espero que tengan un hermoso viernes y un divino fin de semana!

2 comentarios:

  1. Me encanto, me parece que escribís de manera excelente, no abandones mas el blog porque lo amo!

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